Hay momentos en los que las palabras sobran. Mirad, si no, el rostro de este joven cura recién ordenado, mientras su madre limpia sus manos.
Las manos de los sacerdotes son ungidas con óleo en su ordenación y luego limpiadas con una toalla de lino blanca. Una antigua tradición dice que las madres conservan este paño hasta el día de su muerte y en las puertas del cielo. Ese es precisamente su ticket que le garantiza el paraíso.
Este joven bendijo a su mamá con sus manos y luego se fundieron en un abrazo eterno. Porque el amor de una madre y su hijo también tiene algo de sagrado.
El periodista católico José Sachin compartió este conmovedor video en Twitter. “¡Qué momento tan emotivo! Un sacerdote brasileño recién ordenado llora de alegría después de impartir bendiciones a su madre”, dice en su post.
What an emotional moment! A newly ordained Brazilian priest crying with joy after imparting blessings on his mother. pic.twitter.com/f57i1SqR0G
— Sachin Jose (@Sachinettiyil) June 26, 2022
En el video original compartido por el padre Anderson Lima, el joven sacerdote definió este emotivo momento con estas palabras: “Soy todo tuyo, mi amado Jesús“.