Sociedad

Anne Crowter: La joven con síndrome de Down que lucha contra el aborto

La demanda fue admitida el 17 de octubre por el Alto Tribunal de Inglaterra y Gales, que revisará la ley del aborto. La medida legal fue presentada por Heidi Crowter y por Máire Lea Wilson, madre de Aiden, un adolescente de 16 años también con síndrome de Down.

Recientemente la ministra de Salud de Reino Unido, Helen Whately, reveló que 339 bebés con síndrome de Down fueron abortados en los primeros seis meses de este año.

Vida personal y convicciones

Según el sitio web de la Asociación de Síndrome de Down de Irlanda del Norte, para Crowter su discapacidad no le ha impedido “tener una vida plena y divertida”. La joven activista de 24 años tiene un empleo, vive en su propio departamento en Coventry, realiza sus tareas domésticas de forma independiente y en julio, se casó con James Bryn Carter, un joven con síndrome de Down.

La joven señaló que su objetivo es “crear conciencia sobre el síndrome de Down y ser una voz para quienes no lo tienen” y se describe a sí misma como “la primera persona con síndrome de Down en llevar a la Corte al Gobierno de Reino Unido”. 

Para ella, la ley que permite el aborto de bebés con su condición hasta el nacimiento es un acto de “discriminación” contra el que viene luchando a través de sus redes sociales, los medios de comunicación y sobretodo, legalmente.

Actualmente, el aborto en el Reino Unido es legal hasta las 24 semanas de gestación, excepto cuando el embarazo es de riesgo para la salud física o mental de la madre, y cuando el bebé “sufrirá anormalidades físicas o mentales, que resultarán en una severa discapacidad”. En estos últimos casos el aborto está permitido hasta el nacimiento del bebé.

“Cuando supe que un bebé puede ser abortado hasta las 24 semanas y un bebé con síndrome de Down puede ser abortado hasta el nacimiento, me sentí realmente enfurecida y me hizo sentir que no debería existir en este mundo”, lamentó Heidi.

“Lo que ellos [el Gobierno] me dicen es que mi vida simplemente no es tan valiosa como la de otros y yo no creo que eso sea cierto ¡Creo que es una discriminación absoluta!”, señaló.

Mostrar más
Botón volver arriba