“En este momento de tantas dificultades el Espíritu viene con sus dones para ayudarnos a vivir esta pandemia” inició. “Ante todo le pedimos el don de la Fortaleza”, dijo el Obispo Diocesano. Este don servirá “para ayudarnos a perseverar en el bien, para seguir bancando esta cuarentena, cumpliendo con todas las normativas”.
Taussig también pidió este don de la Fortaleza para los médicos, el personal sanitario, servidores públicos “que tanto necesitan, para superar el cansancio y para mantenerse firmes en sus puestos”, afirmó.
“Pedimos también el don de la Piedad, que nos ayuda a rezar con mayor fervor, con mayor fruto, a rezar en familia y aprovechar de más disponibilidad de tiempo para poder encontrarnos con Dios”.
El don del Consejo, también fue nombrado en el espacio. “Un don que nos ayuda a ser prudentes, que no ayuda en las pequeñas y grandes decisiones que tenemos que tomar”
Para finalizar, Monseñor pidió el don de la Sabiduría, que es “el que lleva a plenitud la caridad, la reina de todas las virtudes y la que más necesitamos, para nuestra vida cotidiana y para todos los sacrificios que tenemos que ofrecer”.
“El Espíritu Santo quiere darnos sus dones, quiere encender nuestros corazones en el fuego de su amor”
