“Cómo explicar lo que uno siente cuando son tantos sentimientos encontrados” dice Francisco Romero, presidente del Centro de Veteranos de Malvinas al salir de la catedral, aun con lagrimas en los ojos después de reencontrarse con la Virgen de Luján, aquella que estuvo con él y sus camaradas acompañándolos, protegiéndolos y fortaleciéndose durante la guerra de Malvinas en 1982.
La imagen de Nuestra Madre llegó a la diócesis el pasado miércoles a General Alvear donde se realizó una caravana para acompañarla hasta la Parroquia San José, donde se celebró la Santa Misa.
El jueves 13 de octubre la imagen llegó a San Rafael y estuvo durante toda la jornada para ser venerada en la catedral departamental.
A las 20 h se celebró la Santa Misa para pedir por los soldados caídos en Malvinas y por los veteranos de la guerra.
La celebración eucarística contó con la presencia de veteranos de Malvinas, autoridades y banderas del Ejército Argentino, Gendarmería Nacional, Policía de Mendoza y Policía Federal. “Quisimos convocar a las fuerzas que estuvieron en Malvinas, y también para acompañarlos a ellos, convocamos a todas las fuerzas de seguridad. Nos parecía un momento para mostrar esa unidad en el espíritu que nos puede unir a todos”, expresó el padre Víctor Polo, quien estuvo en cada detalle de la organización y coordinación de la visita de la Virgen.
Juan Antonio Barroso, veterano de Malvinas se volvió a reencontrar con la Madre que lo protegió en sus días más duros en Malvinas. “Hoy es un día inolvidable”, se limitó a decir y luego contó porque el volver a ver la Imagen de la Virgen es tan emocionante y especial para él:
“La noche del 12 de junio tuve la oportunidad de entrar en combate, recibí un bombardeo y lo primero que hice fue tomar una estampita de la Virgen de Luján y ponerla entre mi ropa pidiéndole que me protegiera, y salí bien en aquel momento. Hoy, volver a encontrarme con Ella es volver a recordar todo lo que vivimos y es ver a Nuestra Madre que nos defendió en Malvinas”
Al finalizar la Santa Misa la Virgen de Luján fue llevada en procesión por los veteranos de Malvinas hasta el atrio de la catedral donde la Banda de Música de la Policía de Mendoza Zona Sur le rindió honores a Nuestra Madre.
“Decir que es un momento emocionante es poco”, agregó Francisco Romero, presidente del Centro de Veteranos de Malvinas (CEVEMA) San Rafael. “Cuando nos dijeron que venía la Virgen a San Rafael fue especial y es un honor recibirla. Verla de nuevo recorriendo el país es muy emocionante”.
Entre tantos recuerdos que quedan en su memoria, Francisco recordó uno que tiene siempre presente sobre la protección de la Virgen a los soldados en Malvinas.
“Estaban celebrando misa y hubo un bombardeo. El oficial dio la orden que nadie saliera de allí y ninguna bomba cayó en ese lugar”.
Por su parte, Héctor “Tachi” Flores, conoció este jueves la imagen de la Virgen que estuvo en Malvinas ya que él estuvo en el Crucero Belgrano. Sin embargo, destacó que esta imagen “Es el sinónimo de fe en Malvinas”. “No hubo nada más glorioso que tener la imagen que le dio fe a nuestros soldados para enfrentar a un terrible adversario”, expresó emocionado.
“Considero que ha sido la gestora de salvaguardar muchas vidas en las Islas Malvinas. No tengo duda que muchos soldados estuvieron mucho mejor anímicamente gracias a la presencia y protección de la Virgen”.
Para finalizar, Francisco Romero destacó que el volver a encontrarse con Nuestra Madre “es agradecer por su protección y acompañamiento y también pedirle por nuestro País”. “Le pedimos por la paz, por Argentina, los dirigentes políticos y la unión de los argentinos. Malvinas es la única causa que no tiene grieta. Nos une a todos. Queremos que todos tiremos para el mismo lado y solo así podremos lograr algo”, concluyó.
